1 Corintios 13:1-8 1 Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe. 2 Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy. 3 Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve. 4 El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; 5 no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; 6 no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. 7 Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. 8 El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.

Padre en el nombre de tu hijo Jesucristo venimos delante de ti para poder orar por amor, un amor verdadero como tú lo conoces, un amor sufrido, un amor benigno, un amor que no tiene envidia, un amor que no es jactancioso, un amor que no se envanece, un amor que no hace lo indebido, un amor que no busca lo suyo, un amor que no se irrita, un amor que no guarda rencor, un amor que no se goza de la injusticia, un amor que se goza de la verdad, un amor que todo lo sufre, que todo lo cree, que todo lo espera y que todo lo soporta.

Te rogamos por tu verdadero amor, lo necesitamos porque tú eres el amor, porque el amor es eterno y nunca deja de ser.

Te rogamos para habitar en tu amor y poder amar a nuestros enemigos.

En el nombre de Jesucristo amén.